
Mi último viaje fue a la ciudad de Roma a visitar a mis amigas Flavia y Valentina, aparte de que la primera vez me gustó mucho la ciudad, les prometí que un día iría visitarlas y así lo cumplí. Mi vuelo salía de Heatrhow a las 5:40 pm, pero justo despues embarcar el capitán nos dijo que nos bajaramos del avión ya que había un retraso largo y no podíamos despegar. Al final la Alitalia me puso en otro vuelo, sin embargo al llegar a Roma me dieron la gran noticia...habían perdido mi maleta. En fin Flavia y su papá me estaban esperando pacientemente en el aeropuerto y me dieron la más cálida bienvenida, a pesar de que llegué 2 horas despues de lo previsto. Yo sabía que los italianos eran cálidos como los latianoamericanos pero esto fue el colmo, nunca imagine tan buen trato de su parte. En la madrugada, fui con Flavia a una fiesta cerca de su casa en Albano, un suburbio a las afueras de Roma, donde conocí a sus amigos, tuve que afinar el oido para entender italiano porque ella era la única que hablaba ingles. Despues de unas horas y unas cuantas cervezas empecé a entender todo con más claridad. Luego regresamos a descansar en su casa. Al día siguiente desayunamos y nos fuimos a pasear, fuimos a San Giovanne, una inglesia inmensa de arquitectura clásica de las mas imponentes que he visto en Europa, de ahí fuimos a comer gelatto por supuesto (no podía faltar) Unas horas más tarde fuimos a buscar a Valentina a la estación de Termini, que venía de su pueblo natal a pasar el fin de semana con nostros, al recogerla, nos fuimos a una colina cerca del coliseo. Un lugar llamado Circo Massimo, con jardines inmensos y un mirador espectacular desde donde se puede apreciar casi toda la ciudad, o al menos la parte céntrica. Otro atractivo curioso del lugar es una puerta inmensa con un hojal desde donde se aprecia el techo de la catedral de San Pedro como si estuviera ahí enfrente del observador, cuando en realidad esta super lejos, es una tonta ilusión óptica, pero hay que estar ahí para vivirlo. Luego me llevaron a un centro comercial inmenso llamado Euroma 2, supuestamente uno de los mas grandes de Europa. No es que tenía tantas ganas de shopping, pero como les dije no tenía equipaje, así que tenía que comprar ropa. Al regresar a casa comimos Lasagna de la Nona y nos arreglamos para salir. Fuimos con los amigos de Flavia a un bar al aire libre bien sencillo pero a la vez bien agradable. Al día siguiente fuimos a buscar a la Giulia, la hermana mayor de Flavia y de ahí nos fuimos al lago Nemi, un pueblo al borde de un valle, famoso por las fresas y las flores de lavanda. No fue nada fácil andar por el pueblo ya que todo es empinado y con calles estrechas sin embargo con una atmósfera inexplicablemente agradable, de ahí dejamos a Valentina es su casa y Giulia me llevo al aeropuerto a ver si encontrabamos mi maleta, afortunadamente la tenían en un depósito de Alitalia, al final fuimos a comer pizza a un restaurant super bueno y regresamos a Albano a tomarnos unas cervezas con los amigos de Flavia. El día de mi despedida desayunamos cerca del lago de Albano en un restaurant espectacular y seguimos el camino al aeropuerto de Fuimicino, ahí me despedí sin antes darle mil gracias a Flavia, a su familia y a sus amigos por el excelente trato que me brindaron. Sin duda un viaje para recordar siemrpe. Valentina se quedo conmigo en el aeropuerto hasta que tuve que abordar el avión, por supuesto le estoy esternamente agradecido por tambien recibirme con tanto entusiasmo y amabilidad...Sin duda volveré a Roma de nuevo!

















